La relación entre salud bucodental y enfermedades respiratorias suele pasar inadvertida para la mayoría de personas que las padecen. En este post analizamos las interacciones existentes entre ellas y compartimos algunas medidas para evitar o minimizar los riesgos que implican.

Por lo general se suele pensar que una enfermedad respiratoria solo debe tratarse como tal, pero la realidad es que, dado el estrecho vínculo entre la cavidad respiratoria y la bucal, lo que tiene incidencia en una también lo tiene en la otra.

Aunque no sea evidente para una mayoría de personas, se ha comprobado que una mala salud bucodental tiene un impacto negativo en el sistema respiratorio, haciéndolo más propenso a las enfermedades. Y que a la inversa funciona del mismo modo. Las enfermedades respiratorias y los fármacos que se emplean para tratarlas pueden terminar produciendo problemas de salud bucodental..

Cómo influye la salud oral a las enfermedades respiratorias

La boca es un factor clave en la prevención de enfermedades respiratorias. La relación entre la cavidad oral y los pulmones, así como la presencia de más de 1000 especies bacterianas en la microbiota oral, hacen que la salud bucal sea fundamental para la salud respiratoria.

Enfermedades como la neumonía, la bronquitis y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) son las más comunes y tienen una relación con la salud bucodental.

La EPOC se caracteriza por la obstrucción de las vías respiratorias y la disminución de la capacidad respiratoria. Aunque el humo del tabaco es una de las principales causas, también se ha relacionado la mala salud bucodental con un mayor riesgo de padecer EPOC. Además, los pacientes con esta enfermedad pulmonar tienen más posibilidades de desarrollar una enfermedad periodontal.

En cuanto al modo en el que la salud dental afecta a la aparición o empeoramiento de enfermedades respiratorias, hay que hacer mención del biofilm dental para explicar cómo se relacionan ambos aspectos.

El biofilm dental es una película de proteínas salivales y microorganismos que se acumulan en la cavidad bucal y se adhieren al esmalte dental. Este biofilm dental puede formar placa bacteriana y contribuir al desarrollo de enfermedades bucales como la caries, la periodontitis y la mucositis.

El problema es que los componentes de este biofilm pueden desplazarse a otras partes del cuerpo, incluyendo los pulmones, y provocar enfermedades respiratorias, las cuales pueden afectar especialmente a niños y ancianos debido a que éstos cuentan con un sistema inmunológico más débil.

Biofilm dental: cómo influye la salud bucodental a las enfermedades respiratorias.

Hay investigaciones que avalan esta interrelación. Por ejemplo, en un estudio realizado en la Universidad de Yale demostró que las bacterias que habitan en la boca, especialmente en la placa bacteriana, pueden ser trasladadas a los pulmones y causar enfermedades respiratorias.

Además, la presencia de infecciones bucales, como la gingivitis y la periodontitis, se ha relacionado con un mayor riesgo de padecer enfermedades respiratorias.

Como influyen las enfermedades respiratorias a la salud oral

Las enfermedades respiratorias también tienen impacto sobre la salud de la boca. El asma, por ejemplo, requiere del uso de inhaladores, que generalmente causan sequedad y pueden facilitar infecciones bucales por hongos. El mal sabor de boca también puede ser una consecuencia de estos productos.

La saliva es importante para mantener la boca hidratada y neutralizar los ácidos producidos por los gérmenes en la boca. Una disminución en la producción de saliva puede aumentar el riesgo de caries, infecciones bucales y otros problemas dentales.

Los pacientes que tienen enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) a menudo respiran por la boca en lugar de por la nariz. Esto puede provocar sequedad y afectar al proceso de crecimiento del rostro y dientes si todavía están en edad de crecimiento y puede causar problemas con la mordida, la deglución y un paladar hundido.

Además, otras enfermedades como la bronquitis, el enfisema, la tuberculosis, y la sinusitis pueden afectar la salud bucal de diferentes modos.

La falta de aliento o la tos crónica asociadas con la bronquitis o el enfisema pueden aumentar el riesgo de caries dental y problemas de encías.

La fiebre y la falta de apetito relacionados con la tuberculosis pueden llevar a una pérdida de peso y, por lo tanto, a una nutrición deficiente que puede afectar la salud dental e incluso, aunque de forma rara, a la aparición de llagas dolorosas en la boca.

La sinusitis por su parte puede causar desde dolor y presión en los dientes superiores y la mandíbula hasta boca reseca, con todo lo que ello conlleva.

En definitiva, como puede comprobarse, tanto algunas enfermedades de carácter respiratorio como los tratamientos asociados a ellas pueden tener influencia negativa en la salud dental.

Medidas preventivas

Con objeto de prevenir que tanto la salud bucodental como la respiratoria se puedan ver afectadas, existen una serie de directrices que los profesionales de la salud indican a sus pacientes como manual de buenas prácticas. Entre éstas podemos señalar las siguientes:

Extremar la higiene bucal

Si bien el cepillado frecuente es ya una recomendación básica de salud general, se recomienda a quienes usan inhalador a que se cepillen 3 veces al día y que lo hagan siempre después de haber hecho uso de éste. También se hace hincapié en la recomendación de emplear hilo dental como parte del proceso de higiene dental diario.

Evitar alimentar con mucha azúcar

La aparición de caries, como es bien sabido, tiene una estrecha relación con el consumo excesivo de este tipo de alimentos. A la par que se disminuye la frecuencia con la que los alimentos dulces se incluyen en la dieta, se propone aumentar el de otros como leche, verduras y frutas que son beneficiosos para el fortalecimiento de los dientes.

Eliminar el tabaco

Poco hay que señalar sobre lo dañino de este hábito, el cual afecta de forma notable a la salud respiratoria, pero también causa perjuicios en la salud dental.

Revisar la medicación que se toma

La revisión regular de la medicación para enfermedades respiratorias es importante para cuidar la salud bucodental porque algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios en la boca, como la sequedad, infecciones o aumento de caries. Además, algunos tratamientos respiratorios pueden aumentar la probabilidad de desarrollo de problemas dentales.

Revisión en dentista y pulmones sanos: medidas preventivas para minimizar el impacto de las enfermedades respiratorias en la salud bucodental (y viceversa).

Salud bucodental y enfermedades respiratorias: lo que no hay que olvidar

La relación entre la salud bucodental y la salud respiratoria es un tema de gran importancia que, si bien todavía requiere de mayor atención y estudio por parte de la comunidad médica y científica, parece estar bastante bien documentada.

En este sentido la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) destaca la importancia de mantener una buena higiene bucodental y acudir regularmente al dentista como el mejor modo de prevenir la aparición de algunas enfermedades respiratorias como la neumonía, la bronquitis o la EPOC o disminuir el impacto de éstas.

Y a la inversa, el tratamiento de estas enfermedades debe ser igualmente supervisado para que la salud de la boca no se termine resintintiendo.

Te invitamos a compartir este post sobre salud bucodental y enfermedades respiratorias con aquellos familiares y amigos a los que entiendas que le pueda resultar de interés.