Conoce cómo afecta la osteoporosis a la salud de tus dientes, con qué síntomas se manifiesta y las principales estrategias para prevenir que esta patología perjudique tu salud bucodental.
Osteoporosis y salud bucal están íntimamente relacionadas. Aunque al hablar de osteoporosis la mayoría de gente lo asocia con huesos frágiles que son más proclives a fracturarse, la dentadura también puede verse muy afectada debido a que la masa ósea maxilar se reduce.
La osteoporosis es una enfermedad de los huesos que consiste en que éstos se vuelven más frágiles como consecuencia de la disminución de su masa ósea. Se da con bastante frecuencia tanto en hombres como en mujeres que ya han pasado los 35 años, aunque en ellas su aparición es significativamente mayor tras la menopausia.
Para detectar si la osteoporosis está afectando la salud bucal es necesario realizar revisiones bucodentales radiológicas, que son las que van a facilitar la información necesaria para detectar qué tipo de alteraciones se han producido. A continuación veremos cuales son algunas de las más frecuentes.
Alteraciones bucales en pacientes con osteoporosis
Entre las causas que provocan la aparición de la osteoporosis se encuentran una baja densidad mineral ósea o la deficiencia de estrógenos (razón por la que las mujeres tras la menopausia son más propensas a padecer osteoporosis).
La menor densidad mineral ósea hace que los huesos tengan una mayor tendencia a romperse, mientras que la deficiencia de estrógenos destruye fibras y tejidos que ayudan a mantener la estabilidad dental.
Debido a ello, podemos observar alteraciones como las siguientes:
Reducción del reborde alveolar
El reborde alveolar es la parte del maxilar donde está ubicada la raíz del diente. La osteoporosis afecta a los rebordes alveolares, que son los que proporcionan el soporte para los dientes, y esa pérdida repercute en una menor estabilidad de éstos.
Disminución de la masa ósea
La osteoporosis reduce la densidad del hueso mandibular y el maxilar superior. Como consecuencia de ello se producen alteraciones que afectan el equilibrio de la cavidad bucal y su funcionalidad.
Pérdida de piezas dentales
La menor capacidad de sostén de las piezas dentales hace que éstas se pierdan con mayor facilidad. Si además de la osteoporosis existen otros condicionantes, como una deficiente higiene dental, consumo de tabaco, o el paciente es de edad avanzada, la probabilidad de que se produzca la pérdida de los dientes se incrementa.
Enfermedad periodontal
Si bien no está totalmente demostrada la relación entre enfermedad periodontal y osteoporosis, existen algunos estudios que apuntan a esa posibilidad. Los más concluyentes son los realizados en mujeres post menopáusicas, un grupo en el que se detectó que si padecen osteoporosis tienen un 86 % más de probabilidades de padecer también enfermedad periodontal.
Síntomas de la osteoporosis en la salud oral
Al ser la osteoporosis una enfermedad que afecta a los huesos puede ser difícil de detectar, ya que no hay síntomas que resulten evidentes y hay patologías bucodentales que pueden manifestarse de forma similar. Sin embargo, algunos desajustes en la salud oral sí que pueden darnos una pista sobre la existencia de este problema.
Algunos posibles síntomas de osteoporosis podrían ser los siguientes:
– Dolor en la boca.
– Alteración del sentido del gusto.
– Mucosas secas.
– Dientes que se mueven o que directamente se caen.
– Enfermedad periodontal que avanza con rapidez.
– Sensación molesta en la mandíbula.
En el caso de que se experimenten síntomas como los mencionados es importante hacérselo saber al odontólogo para que investigue la posibilidad de que la osteoporosis u otras patologías sean la causa de éstos.
Efectos secundarios de los medicamentos para la osteoporosis en la salud bucodental
Los fármacos utilizados en el tratamiento de la osteoporosis, principalmente los bifosfonatos y los moduladores selectivos del receptor de estrógeno, pueden afectar a la salud bucal. Aunque estos medicamentos son eficaces para aumentar la densidad ósea y reducir el riesgo de fracturas, es importante conocer su impacto en los dientes, la mandíbula (también llamado maxilar inferior) y el maxilar (también llamado maxilar superior). A continuación, explicamos los posibles efectos secundarios más relevantes:
Osteonecrosis del maxilar y la mandíbula
La osteonecrosis de los maxilares (ONM) es una afección bucodental grave, en la que el hueso maxilar se daña y muere por una reducción del flujo sanguíneo. Es muy rara su asociación con el uso de bifosfonatos por vía oral, como los que se recetan para la osteoporosis. Pero sí se ha observado en algunos estudios una cierta relación entre los bifosfonatos y la osteonecrosis en pacientes oncológicos, a quienes se les administran altas dosis de estos medicamentos por vía intravenosa y durante largos períodos de tiempo como parte de su tratamiento contra el cáncer. Es por ello que nos parecía importante mencionarlo.
Entre los posibles síntomas indicativos de osteonecrosis maxilar se encuentran dolor, hinchazón, enrojecimiento de las encías, dientes flojos, dificultad en la curación tras extracciones dentales o cirugías orales, y la exposición del hueso en la boca.
Retraso en el proceso de curación tras una cirugía bucal
Los medicamentos para la osteoporosis, especialmente los bifosfonatos, pueden afectar a la manera en la que los tejidos bucodentales se recuperan tras determinadas intervenciones odontológicas invasivas, como una extracción dental o ciertas cirugías bucales. Estos fármacos reducen la actividad de las células que descomponen el hueso, lo cual es parte importante del proceso de curación y renovación ósea.
Como resultado, el proceso natural de curación se ralentiza porque el organismo no puede reemplazar el tejido óseo dañado o removerlo eficientemente después de un procedimiento dental. Esto puede hacer que la recuperación sea más lenta de lo normal y, en algunos casos, aumentar el riesgo de desarrollar infecciones en el área afectada, ya que el tejido herido permanece expuesto durante más tiempo.
Alteraciones en la remodelación ósea
La remodelación ósea es un mecanismo natural del organismo, mediante el cual renueva y regenera el tejido óseo continuamente, asegurando de esta manera que los huesos se mantengan siempre sanos y fuertes.
Los bifosfonatos, así como algunos otros fármacos indicados para el tratamiento de la osteoporosis, ralentizan este proceso al inhibir la resorción ósea, es decir, la degradación del hueso viejo. Esto podría afectar a la capacidad de los huesos maxilares para sostener los dientes y a la forma en la que éstos responden a las fuerzas que se realizan durante la masticación, deteriorando la estabilidad dental y la salud bucal general.
Cómo prevenir los efectos de la osteoporosis y sus tratamientos en la salud bucal
Podría parecer que si se sufre osteoporosis no hay mucho que se pueda hacer para mejorar la salud bucal más allá del propio tratamiento que se siga. Sin embargo, minimizar los efectos de la osteoporósis y de fármacos como los bifosfonatos en la salud bucal es posible siguiendo una serie de pautas.
Lo primero es indicar al dentista de que se padece esta dolencia. Esta información debe incluir la medicación que se está tomando para la osteoporosis. Con estos datos el dentista ofrecerá una serie de recomendaciones, entre las que cabría incluir una higiene bucal muy exhaustiva, usar una pasta dental fluorada, aumentar el consumo de calcio o tomar vitamina D (que ayuda a absorber una mayor cantidad de éste)
Además un estilo de vida saludable, con la práctica regular de ejercicio físico y la eliminación de tabaco, alcohol, y cafeína también colaborará a que los dientes se vean menos afectados por la osteoporosis.
Todo esto potenciará el efecto del tratamiento farmacológico contra la osteoporosis que haya sido recetado en cada caso, por lo que en mayor o menor medida la eficacia de éste se verá aumentada.
Asimismo, informando detalladamente al odontólogo, la mayoría de personas con osteoporosis a las que se les ha pautado un tratamiento con bisfosfonatos, pueden someterse a cirugías orales como las extracciones dentales sin poner en peligro su salud bucal.
Post actualizado. Primera versión publicada el 22/12/2022.
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